martes, 20 de octubre de 2009

MIS AMIGOS Y OTROS ANIMALES


Sigo sin estar muy inspirada y mira que la noche ha llegado llena de revelaciones, de aquellas que me hacen pensar en lo mucho que se echa de menos a aquellos que son a fuego, de lo cerca que están aunque estén lejos y lo desnudas que se quedan ciertas cosas imprescindibles cuando se interponen mil océanos. Uno siempre se da cuenta de la realidad de uno y de la soledad en general cuando en la noche lo fácil se vuelve complicado y aquello que se rellenó con gas, se disipa y la nada lo inunda. Los huecos que se cubrieron rápido y sin solidez, se hacen más profundos y un eco ensordecedor y doloroso lo llena todo de un silencio terrible.
Entre fieras, en la oscuridad, todo lo pequeño se hace grande y peligroso.
Hoy echo de menos y también echo de más...